Ser valorado, querido y cuidado es indispensable para aquellas personas que se encuentran en la tercera edad. Habrá que poner especial atención en esas circunstancias que no son nada beneficiosas en el día a día de nuestros mayores. Uno de los problemas más habituales es cómo actuar cuando ocurre una caída. Especialistas como la residencia de ancianos CER Espartinas nos cuentan algunos datos a tener en cuenta en estos casos.
En algunos casos tener una caída no ocasiona ningún tipo de daño, pero en otros sí. Habrá que estar preparado para cualquier situación. En muchas ocasiones pasan desapercibidas, incluso empiezan a ser algo común. Para evitar que tengan lugar habrá que analizar dónde ocurren, siendo frecuentes en los propios hogares, en la cocina, el dormitorio o el baño. Así como también en los primeros y últimos escalones.
En primer lugar, cuando una persona mayor se caiga habrá que intentar valorar cómo de grave ha sido la caída. Comprobar que sigue consciente y que no está sangrando, así como también si presenta algún tipo de herida o contusión. Incluso si puede tener algún tipo de fractura. En el caso de que esté consciente, asegúrate de que se encuentra sin signos de desorientación.
Cuando esté en buen estado, ayúdalo a levantarse. Entre las opciones más acertadas estará la de colocarlo boca abajo e intentar que apoye manos y rodillas para levantarse. A continuación, haz que se incorpore poco a poco, primero hasta las rodillas y luego de pie
Haz que se siente y dale agua. Habrá que volver a revisar si existe algún riesgo de lesión y que lo vea un médico en caso de sospechas. Son muchos los ancianos que viven solos, teniendo gran cantidad de problemas en estos casos. A la hora de necesitar ayuda, una residencia de mayores proporciona todos los recursos necesarios para poder llevar a cabo este tipo de servicio con la mayor calidad posible.